Otras vacunas para perros
Vacuna frente a la tos de las perreras. (Traqueobronquitis infecciosa canina)
La traqueobronquitis infecciosa canina también conocida como “tos de las perreras” “gripe del perro” o “resfriado del perro” es una enfermedad que cursa con toses secas o productivas como síntoma principal, que también puede acompañarse de fiebre, o dificultad respiratoria. Si no se trata a tiempo puede desembocar en una infección pulmonar o en una infección pleural, incluso en pulmonía o neumonía. Puede ser difícil de tratar porque no siempre responde a los antibióticos de amplio espectro ni al resto de medicación habitual para su tratamiento.
Una de las vacunas más controvertidas de la actualidad. Tiene una alta seguridad pero una eficacia discutida. La traqueobronquitis infecciosa canina es una enfermedad multicausal generalmente provocada por la actuación conjunta de un virus respiratorio llamado Parainfluenza III y una bacteria llamada Bordetella Bronchiseptica. +
Las vacunas existentes frente a la enfermedad no ofrecen una protección totalmente eficaz frente a la enfermedad porque el virus parainfluenza es muy mutagénico e igual que la gripe humana, muta fácilmente y hace que las vacunas existentes no sean tan eficaces.
Además hay dos tipos de vacunas frente a esta enfermedad, la inyectada y la intranasal, la inyectada es el formato que a todos nos resulta familiar de una vacuna, una inyección que se administra vía subcutánea debajo del lomo del animal. La vacuna intranasal no lleva aguja y se instila por la nariz del animal, por los dos agujeritos de la nariz llamados narinas. El resultado es que el animal al segundo de instilarla estornuda o se sacude y echa el líquido de la vacuna fuera, las paredes de la nariz quedan impregnadas del líquido, lo que hace que las mucosas nasales del animal reaccionen frente a las gotitas de la vacuna y el animal queda protegido pasados unos días.
Es más eficaz desde el punto de vista inmunológico, ya que activa un tipo de inmunidad llamada de tipo A o inmunidad de mucosas, y es más eficaz porque la vía de entrada de la “gripe del perro” o “tos de las perreras” como también llamamos a la traqueobronquitis infecciosa canina, es la nariz y el aparato respiratorio. Sin embargo, es muy difícil administrar la vacuna intranasal por varios motivos:
- Manejo del animal: la nariz es extraordinariamente sensible, así que los perros no lo toleran siempre bien.
- Riesgo para el veterinario: el riesgo de mordedura en la cara o las manos es muy alto.
- Incredulidad del propietario: Lo que el dueño de la mascota ve, es que le ponen un líquido en la nariz, lo echa fuera al segundo, le dicen que está protegido, y le cobran por la vacunación. Y es muy difícil explicarle a todo el mundo este tipo de funcionamiento de la vacuna.
- Independientemente del tipo de vacuna elegida, ninguna es altamente eficaz, porque como hemos comentado antes, el virus muta con facilidad. Motivo por el cual es muy difícil explicarle a los dueños que a pesar de estar vacunado 2 veces en 15 días, el animal puede contraer la enfermedad.
- Si administrar la vacuna intranasal es difícil la primera vez, la segunda lo es todavía más, porque el perro ya se lo conoce y provoca tener que sujetarlo entre varias personas, estresarlo, etc.
Es por esto, que nosotros recomendamos vacunar grupos de riesgo y no a todos los perros.
Las poblaciones o grupos de riesgo son, a nuestro parecer:
- Perros de pequeño tamaño, por debajo de 10 kilos
- Perros no vacunados que hayan sufrido reiteradamente esta enfermedad en los últimos 2 años.
- Perros geriátricos: a partir de 8 años
- Perros con problemas cardiacos o respiratorios, donde una infección pulmonar podría resultar fatal.
- Perros que tengan que viajar a un país que lo tenga como requisito para el paso de frontera y entrada al país de destino.
- Perros que salen habitualmente al parque con otros perros y que se juntan muchos perros.
- Perros que salen a la calle con temperaturas bajas y/o mucha humedad por la zona en la que viven
- Perros que vivan en colectividades como perreras o refugios.
- Perros que vayan a pasar las vacaciones o cualquier otra época del año en un albergue para animales.
Si tu mascota pertenece a alguno de estos grupos, bajo nuestro punto de vista la vacunación está indicada. Aún cuando no resuelva el cuadro clínico o no evite que el animal lo desarrolle. Porque gracias a la inmunidad parcial desarrollada por la vacuna, en el caso de no evite la aparición de la enfermedad, mitigará sus efectos y el cuadro que desarrollará no será tan grave como lo sería sin haberlo vacunado.
Vacuna frente a coronavirus
La vacuna frente a coronavirus es requisito indispensable para poder viajar a algunos países de América latina, Sudamérica y centro América principalmente. Además, como los requisitos legales para viajar a estos países cambian con frecuencia, se recomienda siempre revisar en el consulado del país de destino los requisitos para viajar a estos países.
Es un virus muy similar al parvovirus, y hay que vacunar al animal tanto de cachorro como de adulto. Existen brotes de coronavirosis en España, suelen aparecer en criaderos o albergues con mucha concentración de cachorros juntos y suelen aparecer junto con brotes de parvovirosis.
El pronóstico de la coronavirosis es si cabe peor que el del parvovirus. La vacunación sin embargo no es habitual porque la vacuna frente a parvovirus provoca una inmunización cruzada frente al coronavirus, al ser virus muy similares estructuralmente, que produce una protección parcial del cachorro o del adulto frente al coronavirus. Si bien, la protección no es completa, al haber pocos casos de coronavirus, no suele vacunarse de rutina frente a esta enfermedad.
Si vas a viajar con tu mascota a los destinos mencionados, asegúrate muy bien si te piden esta vacuna o no como requisito para el viaje.